El director de Epidemiología de la provincia, Diego Garcilazo, brindó un detalle de la situación en la provincia donde aumentaron los casos de dengue en las últimas dos semanas.
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio Plaza), Garcilazo confirmó que “en las últimas dos semanas hubo un aumento de cuadros febriles relacionados directamente a la circulación del virus del dengue y eso hizo que, no solo en Paraná sino en muchas localidades de la provincia, hubiera que reforzar los servicios de guardia, con médicos y enfermeros, principalmente por las consultas de cuadros leves”.
“Nuestra provincia no está acostumbrada a este tipo de brotes; en general en tiempos de mayor circulación viral no superamos los 800 o 1.000 casos en toda una temporada y seguramente en esta temporada vamos a superar los 10.000 casos, es decir que estamos en un brote 10 veces mayor a todos los que hemos tenido históricamente. Esto es algo que se ve en los momentos en los cuales hay una circulación importante, y que está relacionado a la cuestión climática y a que no haya cortado la circulación del virus el invierno pasado. Esto ha hecho que en todo el país tengamos un brote histórico en relación al dengue”, explicó.
Consultado por la falta de medicación en el hospital San Martín de Paraná, el profesional sostuvo: “Desconozco la situación de farmacia del hospital, pero en general todos los hospitales están teniendo y distribuyendo la medicación; puede ser que en algún momento circunstancial no se haya entregado”.
Del mismo modo, sobre centros de salud que permanecen cerrados el fin de semana explicitó que “en general, los centros de salud abren en periodos donde atienden los consultorios, no son guardias. Lo que sí tiene el hospital San Martín –y por eso se ve más gente durante los fines de semana- es una atención ambulatoria para estos casos cuando los centros de salud no están abiertos. Eso también tiene que ver con el aumento de las consultas en general; es muy parecido a lo que pasó con el Covid en algún momento”.
Asimismo, apuntó que “la internación, en general, por dengue es baja, prácticamente el 90% de los casos se pueden resolver en la atención primaria, en un consultorio o un centro de salud. La indicación básica es la hidratación y bajar la fiebre, en caso de que sea necesario porque no siempre es bueno bajar la fiebre. Lo que sí nos preocupa es que se está viendo mucha gente que está tomando paracetamol en dosis excesivas, lo que puede generar daño hepático. Pero principalmente los cuadros que requieren internación son muy pocos”.
“En nuestra provincia aunque hubo un aumento de internaciones por dengue en relación con otros años, la internación no llega a ser una saturación del sistema, y no se supera los 300 a 400 internados en toda la provincia”, amplió.
Consultado por el momento en que se debe consultar un médico, Garcilazo explicó: “Todos los cuadros leves se pueden atender en un consultorio, una salita o un centro de salud, incluso en muchas ocasiones ni siquiera es necesario hacer un análisis de laboratorio; el periodo más complicado y cuando sí se debe consultar al médico es cuando una persona ya diagnosticada con la enfermedad, después del cuadro febril que son los primeros cuatro o cinco días, comienza una recaída con un cansancio anormal sumado a dolor abdominal fuerte con vómitos muy intensos. Ese es un cuadro considerado potencialmente grave, donde se requiere ir a una guardia, una internación y un tratamiento diferente. Ese es el momento de preocupación y de consulta a una urgencia o emergencia”.
En cuanto a la medicación, aclaró que “la fiebre es un mecanismo de defensa del organismo y es el mejor, y el virus del dengue no tiene un tratamiento específico, no hay un antibiótico o un antiviral que vaya a matar al virus, es decir que lo único que mata al virus son los anticuerpos de las personas, el mismo organismo de la persona elimina al virus del dengue, y la fiebre es un mecanismo de defensa. Por eso bajar la fiebre es solamente para cuando es muy alta, o genera mucho decaimiento y mucha sintomatología”.
“Lo que vemos es que hay gente que toma paracetamol de modo preventivo, que piensa que si toma paracetamol antes de tener la enfermedad, no se va a contagiar, y eso no es real. Además hoy se vende paracetamol de 1 gramo, y tomar cuatro en un día puede ser tóxico para el hígado, y hoy vemos gente que está tomando más que eso. Por eso hay que tener cuidado, no hay que asustarse tanto con la fiebre sino después que se va la fiebre si aparecen otros síntomas. Otra cosa importante es que cuando a la persona se le diagnostica la enfermedad, tiene que comenzar a usar repelente de forma permanente porque ahí puede contagiar a otros mosquitos que contagien a otras personas. Y también es importante la hidratación, es incluso más importante que bajar la fiebre”, puntualizó.
Respecto de la reunión del Consejo Federal de Salud (Cofesa) y la inacción del Ministerio de Salud de la Nación que se ve actualmente, el funcionario sostuvo que “desde las provincias tenemos más acceso a los equipos técnicos nacionales que a las autoridades principales, pero de acuerdo a lo que se viene hablando con estos equipos se estaba reclamando un poco más de atención a las áreas de epidemiología, básicamente porque no había director de epidemiología nacional hasta hace un mes aproximadamente”.
“Si bien nos estábamos manejando con los equipos de vigilancia, necesitábamos tener la autoridad; todas las provincias sabíamos qué hacer y cómo conducir la situación pero la planificación o la definición de Nación también es importante para evaluar qué política tomar en cada provincia. Eso fue lo que demandamos y finalmente se resolvió, y se está trabajando con Nación y evaluando cómo se sigue porque estamos en una situación nueva en el país en relación al dengue porque teníamos brotes cada cinco años o cada tres años, pero ahora tuvimos un brote seguido del otro y hay que ver si la situación epidemiológica cambió ya definitivamente y si vamos a ser un país como Brasil donde los brotes de dengue se den todos los años, con lo cual las políticas relacionadas a la enfermedad tendrán que ser diferentes”, señaló.
Por último, advirtió que “ya estamos pensando también en los problemas respiratorios porque en breve vamos a empezar con la circulación de los virus respiratorios” y destacó que “como nunca comenzó la campaña de vacunación antigripal muy temprano, las vacunas hace ya dos semanas que están disponibles para personas en grupos de riesgo”. “La vacunación antigripal va dirigida a los grupos de riesgo, hay una vacuna nueva que es contra el virus sincitial respiratorio, que es una vacuna importantísima y para nosotros es histórica porque va a disminuir las internaciones en la población pediátrica, en los menores de seis meses, de un virus que genera la mayor cantidad de internaciones en la población pediátrica y la mortalidad en menores de un mes de vida. Se aplica a las embarazadas en las últimas semanas del embarazo, ya está disponible y en la provincia se van a aplicar unas 8.000 dosis”, concluyó.