Forenses practicaron la autopsia a la docente asesinada en Cerrito y confirmaron que murió apuñalada. Policía busca pruebas para incriminar al principal sospechoso.
Médicos forenses de la Morgue Judicial de Oro Verde realizaron desde este lunes a la tarde la autopsia al cuerpo de la docente Noemí Suárez, asesinada el domingo en Cerrito en un crimen con todos los indicios de ser un femicidio. Mientras tanto, la Policía se aboca a la búsqueda de pistas y pruebas para develar la autoría del asesinato.
La causa de muerte de la profesora de 51 años fue apuñalamiento, según los resultados de la autopsia, en la cual se encontraron 30 cortes profundos, dos de los cuales, hallados en el pecho, fueron letales. El estudio forense concluyó, además, que la muerte de Suárez dataría de 12 horas antes de ser encontrada el domingo por la noche por su sobrino. El dato llega para aportar indicios a la investigación policial y judicial en curso.
El hecho y el detenido
El hecho se descubrió en horas de la noche del domingo. Familiares de la docente, que viven en otra ciudad, estuvieron tratando de contactarse con ella durante el día, pero nunca contestó llamadas ni mensajes. A la noche, le pidieron a un sobrino de la mujer que fuera hasta la casa a ver qué le sucedía. Cuando el muchacho entró, se encontró con su tía muerta en la cama de su habitación, y algunas manchas de sangre.
De inmediato el joven llamó a la Policía, que se hizo cargo de la escena del crimen. Desde el principio se entendió que se trataba de una muerte violenta, teniendo en cuenta las lesiones que presentaba la víctima en su cuerpo, principalmente de arma blanca en el cuello, que serían las mortales, más otras en los brazos, del tipo de las heridas defensivas.
Los fiscales Cristian Giunta (de Investigación) y Fernanda Ruffatti (de Violencia de Género y Abuso sexual) comenzaron a dirigir los primeros pasos de la investigación, y dieron intervención al personal de la División Homicidios (Dirección Investigaciones) y a la Dirección Criminalística.
En la requisa a la vivienda de la mujer, se hallaron numerosos rastros que serán materia de análisis, tanto de carácter biológico y genético como huellas y otros elementos que se consideraron de interés.
El principal sospechado por el crimen es Oscar Bertuni, de 54 años, empleado de Vialidad provincial y que había mantenido una relación de pareja hasta hace unos meses con la maestra. Está detenido.
Cuando la Policía de Cerrito llegó a su casa, el hombre no entendía el motivo de la visita o bien se hacía el desentendido de la situación. Le pusieron las esposas y lo trasladaron a la comisaría en calidad de detenido.
En el allanamiento a la casa del hombre también se secuestraron varias evidencias que serán peritadas, aunque por el momento ninguna que haya resultado contundente para confirmar todas las sospechas, como ropa o calzado con sangre, por ejemplo. No obstante, de lo analizado por los peritos de Rastros y del Laboratorio surgirán las certezas.
Un dato clave que ubica a Bertuni como sospechoso es el denominador común de la violencia de género: el “no es no”. Ella había cortado la relación y él no quería aceptar esta decisión.
Testigos y cámaras
El personal de Homicidios relevó numerosos testimonios. Por un lado, vecinos de la vivienda de la víctima no escucharon nada extraño, ni un grito ni un golpe que les hubiera llamado la atención. Por otro, en cuanto a la relación entre la mujer y el acusado, se pudo saber que tuvieron un breve noviazgo, no convivían, y hace varios meses Noemí había decidido terminar ese vínculo.
No obstante esta decisión, Bertuni siguió insistiendo en retomar la relación y hubo quienes sostuvieron que se había “obsesionado” y habría acosado a la mujer con esa intención. Aunque no hay denuncias por algún hecho de violencia de género, se remarcó que hubo episodios en que “la molestaba”, según los datos reunidos en la pesquisa.
Ahora, para confirmar este contexto, se aguarda por las pericias a los celulares, tanto de la mujer como del hombre, de las que podría surgir si hubo un encuentro ese domingo al mediodía o en las horas previas.
En cuanto a las cámaras de vigilancia, se informó que hay algunas pero lejanas al domicilio de Noemí y de la casa de Bertuni, no obstante se solicitaron las grabaciones para ir viendo los videos y constatar si hubo algún movimiento del detenido o de otra persona que podría haber asesinado a la mujer.
Según supo UNO, la hipótesis del homicidio en ocasión de robo no se descarta, aunque parece muy improbable por ahora ya que, por un lado, según la Policía casi no hay robos en esta pequeña localidad, o al menos no los hay con semejante violencia. Por otro, se constató que en la vivienda no faltaba ningún elemento.
Noemí vivía sola en la casa de calle Lavalle al 800 de la localidad de Cerrito. Desde la Policía se informó que residió un tiempo en Catamarca, con su exmarido, con el cual tuvo dos hijos. Luego de la separación, volvió a vivir a Cerrito, hace aproximadamente 10 años. La docente trabajaba en la escuela N°68 “Hernando Arias de Saavedra” de Hernandarias.
Este lunes por la noche se realizó una marcha en Cerrito en repudio al femicidio de Suárez y en reclamo de Justicia y el esclarecimiento del hecho.
Fuente: Diario UNO.