Este tipo de explosivos se utiliza para demoliciones mineras y también para uso militar. El material era transportado en una camioneta y sin medidas de seguridad. Fue trasladado por los bomberos a depósito seguro.
Personal policial del puesto caminero ubicado sobre la Ruta Nº12, en Aldea Santa María (departamento Paraná), secuestró alrededor de 300 kilos de material explosivo que era transportado en una camioneta Toyota y sin medidas de seguridad.
Fuentes policiales de la Dirección de Prevención y Seguridad Vial, confirmaron que se trataba de 20 cajas de un componente explosivo que se utiliza para demoliciones mineras o en canteras y también, para uso militar.
De acuerdo a los datos brindados a este medio, el procedimiento se llevó a cabo durante un control cerca en el puesto caminero, ubicado, entre el empalme de la Ruta 12 con la Ruta Nacional 127 y la localidad de Cerrito. Los efectivos notaron que, en la caja de la camioneta, conducida por un hombre de 76 años, había cajas de cartón a medio tapar con una lona.
Al ser consultado, sobre lo que transportaba, el conductor de la Toyota, manifestó en primera instancia, que llevaba Nitrato de Amonio, pero que no contaba con documentación respaldatoria alguna. Además, se aclaró que dicho producto es considerado peligroso para su traslado, y el vehículo no estaba habilitado para tal fin.
Al dar intervención a los Bomberos Zapadores de la división Explosivos, y con el conocimiento del Juzgado Federal de Paraná, se logra determinar que se trataban de veinte (20) cajas, las cuales contenían quince (15) panes y/o chorizos de Gelamon V.F. 65%, “material explosivo plástico”.
El conductor de la camioneta quedó demorado y la Brigada Explosivos de Bomberos, deberá realizar el traslado del material explosivo a un lugar más seguro.
El material explosivo secuestrado es “Gelamon V.F. 65%”. Según explican desde la Dirección General de Fabricaciones Militares las características son que se trata de un “explosivo con Nitroglicerina. Explosivo gelatinoso de alto poder rompedor, con valor fuerza de 65%”.
La dependencia señala que es un material utilizado para “voladuras sobre rocas semiduras o duras. Apto para explotación en galerías, minería subterránea y a cielo abierto, canteras, obras viales, iniciación de agentes de voladura, demoliciones, carga de fondo y de columna en rocas graníticas, cuarcíticas, etc”.
El producto “se envasa en bolsas de polietileno de color rojo y dispuestos horizontalmente en el interior de la caja. Para diámetros menores o iguales a 40 mm: encartuchado en papel parafinado tipo kraft. Los cartuchos se colocan verticalmente dentro de la caja con bolsa interna de polietileno antiestático”, resalta la DGFM.