Un policía protagonizó un hecho violento con su arma de fuego reglamentaria, que tuvo como víctima a otros policías de la Comisaría de María Grande. Se trata de un joven recién egresado de la fuerza provincial, quien quedó exonerado de inmediato. El hecho tuvo lugar en la mencionada localidad de Paraná Campaña el domingo por la tarde, en una vivienda de una familia de apellido Romero.
Un policía protagonizó un hecho violento con su arma de fuego reglamentaria, que tuvo como víctima a otros policías de la comisaría de María Grande. Se trata de un joven recién egresado de la fuerza provincial, quien quedó exonerado de inmediato. El hecho tuvo lugar en la mencionada localidad de Paraná Campaña el domingo por la tarde, en una vivienda de una familia de apellido Romero.
En un momento comenzó una discusión entre los integrantes del grupo familiar, entre quienes se encontraba el joven que desde hacía muy poco tiempo vestía el uniforme de la Policía de Entre Ríos.
Este muchacho estaba alcoholizado, y este estado lo tornó violento, por lo cual los insultos que profería fueron acompañados por el uso del arma reglamentaria que el Estado le proveyó para la seguridad ciudadana.
En ese entonces, un patrullero de la comisaría local se encontraba de recorrida por la zona y los efectivos que iban a bordo escucharon dos detonaciones de un arma de fuego, y que uno de los balazos había impactado en el parante del móvil policial.
Alarmados por el grave ataque, los uniformados se bajaron del auto y se dirigieron a la vivienda desde donde provino la agresión. En la vereda comenzaron a dialogar con los familiares, hasta que salió el joven policía, sin saber todavía que se trataba de un funcionario policial.
El joven salió sin remera y empuñando el arma de fuego, con el cual les apuntaba a los policías mientras los insultaba y amenazaba. Uno de los efectivos de la comisaría se acercó y mediante el diálogo intentó calmarlo y distraerlo, mientras su compañero lo sorprendió, lo redujo y le sacó la pistola.
Al momento de identificarlo, advirtieron que se trataba de un colega. Lo trasladaron a la dependencia policial y pusieron el hecho en conocimiento de la Fiscalía en turno, que ordenó a su vez el secuestro del arma de fuego calibre 9 milímetros. El muchacho quedó imputado por el delito de Abuso de arma y amenazas calificadas.
Una vez que el hecho fue comunicado a las autoridades policiales, desde la Jefatura de la Policía se dispuso de inmediato la exoneración del agente y su expulsión de la fuerza policial. Debido a que no cuenta con la antigüedad suficiente, la medida de baja se produce de forma automática, tal como lo prevé la ley que reglamenta a la Policía provincial.
El ahora ex agente Romero había egresado de la Escuela en la última promoción de marzo, y como a la mayoría de los recién recibidos se lo había destinado a cubrir un puesto en la División de Seguridad Urbana y Bancaria en la calle, en la ciudad de Paraná, informó Canal Once.
Fuente: Nueva Zona.