Roció Ortega tenía 16 años y había sido intervenida quirúrgicamente a principios del 2012 por metástasis en uno de sus pulmones, producto de la osteosarcoma que le habían detectado y que es el cáncer óseo más común en niños y adolescentes. En la página de Facebook “Gotitas de Rocio” ella brindaba información sobre su estado de salud y tenía un permanente contacto con una considerable cantidad seguidores que disponían de todo su apoyo. El jugador Paolo Goltz (Lanus) junto con todo el equipo- en un partido- habían desenrollado una bandera donde figuraban las formas de ayudar. Marcelo Tinelli llegó a publicar el pedido de ayuda en su cuenta de Twitter.

La mamá de Rocío Ortega, en el 2013 manifestó: “En agosto del 2012 empezaron los problemas. Un osteosarcoma es un cáncer maligno de hueso que se produce por células tumorales. A Rocío le dolían las piernas, pero no era un dolor en un lugar específico. Por eso la llevamos al médico. Primero dijeron que era lumbalgia, después pie plano, hasta que un médico nos dio el diagnóstico correcto y nos sugirió llevarla a Buenos Aires, ya que ni en Entre Ríos ni en Santa Fe hay oncólogos infantiles, que son los especialistas que ella necesita. Es un tumor muy agresivo, porque ella está en edad de crecimiento. La primera opción que nos ofrecieron fue hacer el tratamiento en Paraná, pero no hay profesionales específicos para su problema. Mandamos cartas al gobernador Sergio Urribarri y a través de la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Alicia Kirchner, intercedieron para destrabar la situación”, señaló.


Rocío bailaba en la comparsa Malibú. Incluso llegó a participar de la primera noche de la edición 2013. Después no pudo continuar por los dolores, que cada vez se hacían más frecuentes.


Piedras en el camino


El Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (IOSPER) finalmente le cubrió la intervención a la adolescente, pero mientras duró el proceso, la familia debió afrontar gastos de estadía, medicamentos y otros costos no contemplados en el presupuesto que le aprobaron. Por eso los servidores de la Peregrinación de los Pueblos, que todos los años unen Hasenkamp con Paraná, y de la cual María Verónica y su pareja también formaban parte, organizaron un evento solidario para juntar fondos. “Un millón de sonrisas para Rocío” fue el lema de las cruzadas solidarias que se hicieron en su nombre, ya que ese era el costo del tratamiento que debían afrontar sus padres si la obra social no le daba cobertura.


Las piedras que sortearon y continúaron evadiendo a Rocío Ortega y su familia fueron muchas. “En un principio, nos pagaban un hotel cerca de la clínica, pero es un lugar que tiene muchas escaleras y ella no podía subirlas.


A su edad es muy fuerte lo que le pasó. Tenía muy buena salud y de repente le diagnosticaron el cáncer. Siempre fue una chica muy activa, con ganas de vivir y ser feliz”.


Una historia contada a través de Facebook


Mientras Rocío permaneció internada en Bueno Aires, su papá y sus hermanitas estaban en Hasenkamp. La red social Facebook se convirtió en un punto de encuentro importante para trasmitir las novedades del día a día a ellos y a sus familiares y amigos de Entre Ríos.  Se había creado la pagina “Gotitas de Rocío” que registraba todo lo que le iba pasando a la adolescente semana tras semana. Los buenos augurios, información sobre el cáncer y cadenas de oración pidiendo por su salud no se hicieron esperar.


La madre había manifestado que ella tenía en mente escribir un libro para contarle a un amigo imaginario el procedimiento de su enfermedad y la vida. Sus profesores le enviaban trabajos para que ella no pierda el año y se mantenga activa.


El 6 de junio Rocío Ortega fue intervenida quirúrgicamente en un pulmón, ya que el cáncer hizo metástasis. “Más allá de que nos sorprendió, todo salió bien gracias a Dios. Todos esos pequeños tumores fueron sacados”.


 “Es mucha la gente que ayudó y agradecemos. Nada nos resulta fácil, ya que los gastos fueron muchos y no somos una familia de alto poder adquisitivo. A Rocio tuvimos que comprarle ropa nueva porque bajó 10 kilos.


Organización de eventos


El futbolista Paolo Goltz intercedió en el Club Atlético Lanús para que los jugadores se sumaran a la movida por Rocío y salieran con una bandera a la cancha informando las formas de ayudar. Hasta Marcelo Tinelli en su cuenta oficial de twitter publicó el pedido de ayuda, con todo lo que eso significa, ya que tiene miles de seguidores”.


Rocío contaba su historia


Esta semana Rocío Ortega decidió narrar los mes de su vida. Explicó que “Todo empezó con un dolor muscular en la pierna, principalmente en la rodilla, pero como con un medicamento se me pasaba, no le hice caso. Como el dolor era cada vez más continuo, fuimos a ver a un traumatólogo que atendía en mi localidad, que me dijo que tenía una lumbalgia y que con unas semanas de kinesiología se me iba a pasar. Pero no fue así, el dolor seguía y se hacía cada vez más fuerte”.


Sobre el tratamiento y lo duro que pueden ser las quimioterapias, la joven manifestaba: “cuando se habla de quimioterapia uno se imagina una versión distinta y no tiene ni idea de qué se trata. En mi caso, en lo primero que pensé fue en la pérdida del pelo, y lamentablemente fue así: se me cayó todo. También baje mucho de peso, de 8 a 10 kilos. Se me manchó el cuerpo por una droga y me aparecieron llagas desde los labios hasta el estómago. Es muy doloroso. La quimio hace que tus hormonas generen cambios: no tenés apetito, tenés mucho sueño y días de mal humor o desgano”.


En una historia de lucha constante Rocio se ganaba el apoyo de todos para salir adelante. Lamentable, Dios quiso que la joven continúe su vida en el cielo y en el corazón de los que se conmovían por sus ganas y su fuerza inconmensurable.


Archivo: Paralelo 32.