Este domingo, en horas de la tarde, se conoció la noticia del deceso de uno de los pioneros de la frecuencia modulada en Cerrito, Daniel “Pocho” Barzola. Tenía 65 años. Padecía una compleja enfermedad que lo tuvo a mal traer por unos meses. Fue precursor y director de FM 99.7, músico en Banda “Los Metales”, propietario de una empresa metalúrgica y titular de Zelenium Sonido. A continuación, cómo lo recordó un ex compañero de trabajo y periodista de la localidad.
Este domingo se apagó tempranamente la luz de un luchador incansable de lo que mas apreciaba: la música y la comunicación. Ese fue Daniel Atilio Barzola, “Pocho” como todos lo conocíamos. También tuvo otros oficios, como realizar labores en su taller metalúrgico y el sonido en espectáculos públicos.
Era ese ciudadano, con el cual realizamos varias tareas conjuntas, cuando se iniciaba la primera frecuencia modulada de Cerrito. Fue éste y otro amigo (Guillermo Gegenschatz), conocedores en la materia que protagonizaron la sociedad del primer medio radial de la localidad.
Realizaba grabaciones para el medio, con su voz delicada y educada. Además siempre estaba atento a cualquier requerimiento sea técnico o de conducción de programas.
Pero, hoy quiero recordar a este amigo que ha dejado un legado que todos debemos defender y no claudicar, porque era de esos que pregonaban humildad, honestidad y trabajo.
“El Pocho”, era una persona sencilla, de profundos sentimientos, luchador por los valores familiares, defensor de ideales, precursor de que hay que poner ahinco en lo que se quiere lograr y defender.
Siempre tenía presente la defensa de su familia, a quien inculcó buenos valores, y de esta manera formó su grupo familiar con hijos que hoy continúan ese camino como él mismo les enseñó.
Surgen infinidad de anécdotas, comentarios y otras vivencias que siempre lo recordarán como un hombre integro, sin tener un protagonismo directo, porque era de esos que no le gustaba estar figurando al frente de algo, aunque la idea fuese propia.
Seguramente, en la localidad, lo recordarán como quien puso en funcionamiento “una propaladora”, que difundía noticias del pueblo y música.
Luego, llegaron los tiempos de otros medios como la radio, algo que a “Pocho” le gustaba de sobremanera. Siempre tenía esa mezcla de creativo y cauteloso, por el respeto que demandaba la misma actividad.
No pasará mucho tiempo, para que lo valoren como el hombre que dedicó mucha pasión y esmero a lo que consideraba era una herramienta fundamental para la localidad y la región como era una radio.
Hoy a temprana edad, una enfermedad lo sorprendió y ya no le dio la posibilidad de seguir por la vida terrena sembrando esos valores de respeto y esfuerzo.
Las palabras casi siempre no alcanzan para caracterizar a una persona que conocimos grande en personalidad y con firmeza en sus convicciones.
“El Pocho”, quedará en el recuerdo de muchos, con nostalgia lo tendrán como un estandarte de la comunicación en Cerrito y su zona.
Estará en el recuerdo de quienes, también, aprendimos de él.
Por Rubén Lovera.