Javier Zaragoza, el único sobreviviente del auto que protagonizó un siniestro en la zona de El Palenque, el 28 de enero pasado, mejora su estado de salud. Si bien continúa internado en terapia intensiva del hospital San Martín de Paraná, sus familiares confirmaron que está lúcido y su recuperación es gradual. En el accidente murieron cinco integrantes de una familia oriunda de Villa Urquiza.
La hermana de Javier, Mónica Zaragoza, mencionó que el muchacho “está muy bien, recuperó conciencia, lucidez; es un proceso que se planteó gradual por el mismo traumatismo y por la cantidad de días que estuvo inconciente”.
“Ayer se le hizo tomografía de cerebro, tórax y abdomen, salió todo bien, el hematoma que existió en un principio, en el cerebro, ya desapareció.
Ahora van a esperar unos días más para que se regularice la cuestión renal, que se recuperen en su capacidad, los riñones. Estimo que en cuestión de días, va a estar en condiciones, de pasar a rehabilitación”, comentó además.
Consultada respecto a si su hermano, tiene conocimiento de las consecuencias de los sucesos de aquél sábado trágico, donde murieron cinco integrantes de su familia amiga, dijo que Javier, tiene una traqueotomía, “se lo ayuda con oxígeno, y eso impide que hable, sólo pronuncia palabras aisladas, pero no puede sostener un diálogo”.
Los hechos sucedieron el 28 de enero pasado, a la madrugada, donde Maximiliano De Guisto, conductor de la camioneta Mitsubishi, colisionó en la ruta 12, en cercanías de El Palenque, a un Fiat Duna. Producto del choque, murieron cinco de los seis ocupantes del vehículo. El muchacho había estado con esta gente en un asado y luego se encontraron en la madrugada en la ruta.
En un primer momento el acusado, oriundo de Villa Urquiza al igual que las víctimas, fue detenido por el tenor de las consecuencias del accidente y por entenderse que transitaba alcoholizado.
Las cinco personas que fallecieron pertenecían a una familia reconocida de Villa Urquiza. En el Duna, se trasladaban Omar Restano de 46 años y su esposa, Mercedes Lovera de 42; sus hijos José Luis de 16 años, Andrea de los Ángeles de 17, quienes perdieron la vida en el incidente. Lo mismo ocurrió con María Belén Restano de 24.
Javier Zaragoza de 32 años se salvó y hoy, evoluciona favorablemente.
De Giusto estuvo dos días preso y luego recuperó la libertad, bajo severas restricciones, entre ellas cuenta con la prohibición de conducir vehículos, como también ingerir bebidas alcohólicas y no acercarse a los familiares de las víctimas. El juez de Instrucción Elvio Garzón le aclaró que si violaba algunas de las medidas sería derivado al penal de Paraná. Analisis Digital