La Agrupación Rojo y Negro de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) advirtió que “los docentes de Paraná, Ciudad y Campaña, venimos desde hace meses movilizados, en estado de alerta y asamblea, con denuncias y planteos bien claros: no pagaremos esta crisis que el gobierno ya no puede ocultar, ya que no la provocamos. Los índices nos muestran claramente el modo en que el gobernador, Sergio Urribarri busca descargar sobre nosotros el ajuste”. Fuertes críticas a la Comisión Directiva Central del sindicato, a quien reclamó la “urgente convocatoria a congreso”.
Docentes advierten que no pagarán “el ajuste del gobierno”.
En el documento, al que accedió esta Agencia, la Agrupación Rojo y Negro de Agmer recordó que el “aumento salarial” que recibieron losa docentes “es el menor de los últimos tres años (30,5 por ciento en 2010; 22,8 por ciento desde marzo de 2011 y, desde marzo 2012, un promedio anual de 16 por ciento). Esto deja nuestro salario mínimo inicial en 2.800 pesos, muy por debajo de la línea de la pobreza (real) y muy lejos del costo de la canasta familiar real, que además no para de aumentar. Este salario mínimo es el mismo que hasta Ctera rechazó a nivel nacional”.
También afirmó que el gobierno “insiste con su idea de avanzar contra la ley 8732, de jubilaciones y pensiones de la provincia, con el objetivo de aumentar la edad jubilatoria y los años de aportes, y quitarnos el 82 por ciento móvil (para que Entre Ríos deje de ser una ‘excepción’ a la triste regla nacional”.
Más adelante, la Agrupación destacó que “el gobierno continúa reteniendo los aportes al Iosper. Más de 60 millones de pesos, según los últimos datos, que nosotros ya aportamos y la gestión de Urribarri ilícitamente retiene y no gira a nuestra obra social, buscando ahogar y desfinanciar nuestro sistema solidario de salud. Los trabajadores tampoco somos responsables de la crisis de la Osplad, que deja sin cobertura a miles de compañeros y sus familias”.
Párrafo aparte dedicó la Rojo y Negro al crédito de 100 millones de pesos que el gobierno tomó en marzo para pagar salarios, así como a la decisión de abonar los sueldos “en cuotas”. “Esta medida fue hipócritamente aplaudida en un principio por distintos dirigentes sindicales y constituye una muestra más de que la crisis que denunciamos desde hace mucho tiempo, es innegable”.
Y señaló que ahora, el gobierno intenta “manotear” parte del salario “confiscando un monto en concepto de Impuesto a las ¿Ganancias?, algo que suena a burla para trabajadores que cobramos sueldos que con mucha antigüedad y otros requisitos recién pueden alcanzar y superar el costo de la canasta familiar real”.
La Agrupación Rojo y Negro también se refirió a “la dilatada normalización, democratización y autonomía de la Uader”; a los comedores escolares, que “siguen con aportes miserables y la copa de leche recibió recortes”; a la crisis edilicia, “con obras paradas y escuelas que debieron movilizarse para reclamar aulas y baños dignos para todos”; a los transportes escolares terrestres y fluviales; y al grave problema social que existe porque “nuestros niños y sus familias hacen crisis en la escuela”.
Sin embargo valoró que con la movilización de algunos departamentos “se haya frenado el intento de derribar nuestra ley 8732 de jubilaciones, así como que no se vuelva a pagar de forma desdoblada. Ahora, la lucha debe ser provincial,¡porque la crisis y el ajuste no son un enemigo fácil de enfrentar!”.
Duros reclamos a la comisión directiva central de Agmer
En otro apartado, la Rojo y Negro destacó que no entiende como en ese contexto La CDC de Agmer terminó “aceptando” “un sueldo mínimo de bolsillo de 2.800 pesos, rechazado por el sindicato a comienzos de año y por Ctera a nivel nacional. Tampoco entendemos con quién fue consultada la decisión de esperar a agosto para ‘volver a discutir’ salario con el gobierno, ni en qué condiciones se dará dicha negociación”.
La Agrupación advirtió que sigue esperando que la comisión directiva central de Agmer “de señales, en función de lo que sus integrantes plantearon durante toda la campaña electoral 2011: un aumento por encima del piso; techo mínimo nacional y la recuperación del salario confiscado en concepto de días descontados por huelga. Esta decisión del gobierno de Urribarri, de castigar y perseguir nuestras luchas, que viene de mediados de 2008 (anterior conducción Celeste, con Sergio Elizar como secretario general), aún no se ha modificado, y hoy se utiliza a modo de extorsión: no les descontaremos los días, nos dicen, mientras no hagan paro… ¡Seguimos en la misma que hace cuatro años!”.
Por ello, reiteró la exigencia a la CDC del sindicato, para que convoque “en forma urgente” a un congreso sindical, para definir, en este nuevo escenario de crisis ya declarada, “qué haremos y cómo nos daremos un plan de lucha provincial”.
Asimismo impulsó “la necesidad de discutir de qué modo participaremos del paro nacional del 8 de junio, convocado por CTA Nacional y al que desde la Rojo y Negro adherimos, con la convicción de que ninguna lucha de fondo, contra el ajuste, será victoriosa si su planteo no es de carácter nacional”.
Acompañamiento a los vocales de los trabajadores de la educación
La Rojo y Negro reivindicó y valoró “el trabajo realizado por nuestros representantes (de la Agrupación) en el Consejo General de Educación. Los compañeros del equipo que tiene a Susana Cogno como vocal gremial, en trabajo conjunto con la CDC de Agmer (2009 – 2011), lograron transparentar el régimen concursal”.
La Agrupación repasó los logros obtenidos con los concursos, anunció que se prevé que para mediados de año “será el turno de Paraná” y recordó que se titularizaron docentes de música y tecnología, “algo impensado años atrás, resolviendo una situación de injusticia generada por la ex vocal Blanca Benavídez”.
No obstante aclaró que este camino “debe continuarse y profundizarse. Necesitamos inscripciones y credenciales nuevas en secundaria, titularización de las horas cátedras del 2008 al 2011, efectivización de los listados y concursos en Primaria en los departamentos que faltan, incluyendo Paraná”.
También advirtió que “el gobierno y el sindicato están en varias paritarias simultáneas sin resultados a la vista. No queremos que éstas se dilaten en el tiempo y terminen encorsetando el conflicto escolar y la lucha de los trabajadores”.
Y concluyó: “los Rojo y Negro de Agmer no desistiremos de nuestra lucha como trabajadores de la educación y no entregaremos a la patronal algo tan valorado para nosotros como la dignidad. En el sindicato y en el CGE, continuaremos profundizando el camino del compromiso, la unidad y la pelea por los docentes y la educación pública. La única lucha que se pierde es la que se abandona”. Agencia AIM.