Al cumplirse un año de gestión de Ariel Robles al frente de la Municipalidad de Crespo desde la UCR local se realizó un balance. “Lamentablemente en este tiempo, la ciudad se alejó de aquel “modelo” que fuimos de ciudad pujante, trabajadora y emprendedora”.“Notamos que la Municipalidad no ha acompañado con acciones concretas el natural impulso que caracterizó a nuestra comunidad desde la iniciativa privada y que la hicieron destacarse dentro de la Provincia de Entre Ríos”.
“La infraestructura de la Ciudad no es la adecuada a la expansión urbana producida, y –más aún- el propio Estado se ha desentendido de la planificación del crecimiento de la Ciudad”.
“En este año, los crespenses hemos visto situaciones que no eran comunes, como el colapso de prestaciones básicas que la Municipalidad garantizaba a sus vecinos, como por ejemplo los recurrentes y prolongados cortes del servicio de agua potable domiciliario y para las industrias locales. Recordemos que este año hubo un aumento de tasas y para el 2013 tienen previsto otro más”.
“La proliferación de aguas servidas corriendo en cunetas a cielo abierto y las roturas de las plantas elevadoras de líquidos cloacales en diversos sectores de la ciudad, con el consecuente derrame de líquidos, también son postales diarias, antes desconocidas por los crespenses”.
“Pese a los reiterados y rimbombantes anuncios, poco y nada se ha avanzado en el saneamiento del sistema de tratamiento de efluentes cloacales, tanto domiciliarios como industriales, y los olores nauseabundos siguen siendo una pésima señal de estar llegando a la Ciudad”.
“Respecto al servicio de recolección de residuos, las erráticas decisiones que se fueron tomando echaron por el suelo un emprendimiento comunitario y participativo (que excede de una gestión de gobierno) como fue el Proyecto de Recolección diferenciada de residuos sólidos urbanos y su tratamiento posterior. El Justicialismo en estos 9 años propuso la instalación de un horno incinerador, luego la instalación de rellenos sanitarios para ahora –aparentemente- volver a la separación en origen y tratamiento en la planta, sin generar ningún ámbito de participación ni de consulta a los vecinos, creando una tremenda desconfianza en éstos sobre la efectiva voluntad de gestionar seriamente los residuos por parte del Municipio”.
“La Obra Pública, caballito de batalla en la propaganda oficial, ha desaparecido en lo que a obras por administración se refiere. La pavimentación urbana queda supeditada a la capacidad de los frentistas del pago anticipado a precios que no varían a los que cobraría una empresa privada mediante el sistema de ahorro previo”.
“Somos testigos en los últimos tiempos del aumento de llamados de licitación de mano de obra para la construcción de –por ejemplo- “cordón cuneta”, obras básicas que siempre fueron hechas por empleados municipales, no solamente por la simplicidad de dichas obras, sino por la notoria economía que significa ocupar dicha mano de obra –probadamente calificada y eficiente para ejecutarlas- y no contratar empresas que adicionan –obviamente- su propio lucro al precio a cobrar que en definitiva pagamos todos”.
“Obras prometidas y varias veces anunciadas como el enlace del acceso Illia con la Ruta Nº 131, la pavimentación de avenidas, siguen siendo solo eso, promesas. El mantenimiento general de la Ciudad no ha logrado sostenerse, pese a haber contado el gobierno local con recursos inéditos por su cantidad. Así, hemos visto y se lo hicimos saber siempre por intermedio de nuestros concejales, que el problema de las calles no pavimentadas sigue sin resolverse y agravándose con cada vez más baches, con las crecientes quejas de los vecinos por el problema del polvillo originado por la broza y la falta de un adecuado servicio de riego y mantenimiento de las calles después de cada lluvia”.
“Los espacios verdes y parques públicos muestran también una deficiente conservación, siendo tal vez las postales más tristes de ese deterioro el estado calamitoso de la vía aeróbica y del Parque del Lago, en estado de total abandono”.
“En relación a al ejecutivo propiamente dicho , aumento desmedidos de sueldos para ellos mismos, gran incremento de la cantidad de contratados “profesionales” que no se sabe cuál es la función específica que cumplen, gastos groseros que en muchos casos llevan a sospechar que son para provecho personal y no de representación de la ciudad”.
“Por ultimo le pedimos al Intendente que haga el esfuerzo y venga a vivir a la ciudad que gobierna. De esa manera podrá comenzar a constatar la veracidad absoluta de este comunicado”. (APF.Digital)
