Un docente de esta localidad fue acusado de abuso sexual y amenazas contra un alumno. La víctima tiene 13 años, y ya en diciembre de 2009 el abogado de la familia había cursado una carta documento al Consejo General de Educación (CGE) advirtiendo de la peligrosidad del maestro involucrado, pero no obtuvo respuesta. Según las primeras informaciones emanadas de ámbitos judiciales, la doctora Zilli encontró suficientes elementos como para imputar al profesor, quien además es árbitro nacional de fútbol, y caratuló la causa como “abuso sexual simple, gravemente ultrajante, reiterado y agravado, en concurso real con amenazas”. Si bien la identidad del imputado aun no se hizo publica, se trataría de una persona ampliamente conocida en la zona, fundamentalmente por su actividad en el fútbol oficial.

Luego de haber sido denunciado el año pasado por los padres de un alumno –quien durante bastante tiempo habría ocultado lo que venía ocurriendo debido a que habría estado bajo amenazas y constante hostigamiento–, la jueza de Instrucción Nº 8, Eliza Zilli, ordenó que se cumplimente la detención de un profesor de educación física, que desempeñaba tareas educativas en el Instituto Secundario Comercial Mariano Moreno de la localidad de Hasenkamp, en el departamento Paraná.


La medida se cumplimentó tras obtener un cúmulo de pruebas suficiente como para comenzar a accionar contra el denunciado, ya que tras advertirse serias deficiencias en la conducta y desempeño como alumno, el menor de 13 años terminó admitiendo ser la víctima de abuso. De esta forma, los progenitores –integrantes de una antigua familia de esa localidad–, pusieron la causa y el seguimiento judicial en manos del abogado paranaense Rubén Pagliotto.


Dentro de lo que pudo conocer EL DIARIO, tras consultar fuentes judiciales, la doctora Zilli encontró suficientes elementos como para imputar al profesor –quien además es árbitro nacional de fútbol–, y caratuló la causa como “abuso sexual simple, gravemente ultrajante, reiterado y agravado, en concurso real con amenazas”.


Según versiones extrajudiciales, no dejó de llamar la atención que el representante legal, luego de sumar elementos que, a clara vista estaban siendo ya parte de un expediente penal, comunicó el hecho a las autoridades educativas dependientes del gobierno de Entre Ríos en diciembre de 2009 y no obtuvo respuesta alguna.


De acuerdo a las fuentes, se llegó a comunicar formalmente la denuncia penal contra el profesor de gimnasia a través de una carta documento, adjuntándose los elementos que hasta ese momento se habían colectado no como versiones, sino como pruebas que iban siendo sumadas al expediente, con la idea de motivar la preocupación de la titular del área de Educación, profesora Graciela Bar, y lograr que se tomen los recaudos pertinentes de los cuales aparentemente nunca hubo una respuesta de tono formal desde el CGE.


• Causa y antecedentes


Para llegar a la imputación del docente, se tuvo que aguardar una importante cantidad de estudios y testimoniales de profesionales médicos, psicólogos, orientadores pedagógicos que trataron a la víctima, a los que se sumaron las declaraciones de los padres y cartas del menor, quien explicaba su tortura de estar en ese instituto educativo, llegando a refugiarse todas las horas que tenía que cumplir allí dentro del aula, ya que el estado de terror que llegó a padecer lo obligaba a tratar de evitar cruzarse con el denunciado en los recreos o en los pasillos.


Según lo que se investigó hasta hoy, el alumno era sometido a un permanente hostigamiento y malos tratos por parte del profesor de gimnasia, que llegaron al extremo de someterlo –en octubre de 2008 cuando comenzaron a hacerse extremos los alcances de su persecución– en el baño de la misma escuela, donde luego de burlarse y amedrentarlo, le habría bajado los pantalones y presionado con la mano sobre la zona anal, situación que se reiteró en otras ocasiones. El chico terminaría admitiendo que nunca quiso contar esta situación a los padres por vergüenza y miedo, debido a que las intimidaciones se sumarían también fuertes bofetadas inflingidas por el profesor. En algunos contactos con los profesionales que trataron a la víctima, admitió que llegó a odiarse a si mismo por lo que le estaba ocurriendo, se describió.


Aparentemente, si bien el caso de este menor sería hasta el momento el único denunciado como abuso sexual, existirían antecedentes de un hecho ocurrido en la localidad de María Grande, donde el mismo maestro habría provocado maltrato físico degradante en la escuela 181, inflingiendo lesiones corporales a niños, que también habrían sido denunciadas y constatadas por dos médicos de esta localidad del departamento Paraná.


Por el momento, el docente acusado, luego de ser cumplimentada la medida de detención por la policía de Hasenkamp, fue trasladado a la Alcaidía de Tribunales y, posiblemente, en la mañana de hoy viernes sería indagado por la jueza Elisa Zilli. (APF.Digital)