La Biblioteca Popular “Presidente Avellaneda” de Colonia Avellaneda, viene funcionando en el Centro Cultural “José Hernández”, espacio que le fuera cedido hasta el 18 de enero por el municipio local. Vencida la prestación, el gobierno pretende contar con ese lugar para otras acciones. En una reunión realizada la semana anterior, los integrantes de la Comisión de la Biblioteca fueron recibidos por el intendente Edgardo Dellizotti y el secretario de gobierno Sergio Robles, quienes manifestaron que le resulta imposible dar más tiempo de ocupación porque la gran demanda y exigencia de la comunidad, obliga a utilizar los espacios del Centro para ampliar el área de Acción Social, específicamente el área de la Niñez, donde pretenden instalar una sala de estimulación temprana.

Desde la casa municipal informaron que ante la negativa de entregar en comodato gratuito por dos años de los directivos de la Biblioteca, se podrían perder talleres culturales para este año al igual que subsidios destinados al área de la Niñez, Adolescencia y Familia. En un comunicado se detalla que el municipio ya cedió un predio gratuito en el Centro Cívico y se encuentra a medio terminar una edificación de la Biblioteca que data de 2007, desde esa fecha no se ha realizado ninguna mejora en ese lugar. “Prosiguiendo con la buena voluntad de esta gestión, se le prestó a título de comodato instalaciones en el Centro Cultural ‘José Hernández’.


Transcurrido el plazo del 18 de enero del 2010, se le debería restituir a Cultura ese espacio”, señala el informe del ente gubernamental. “La falta de previsión después de cuatro años de los miembros de la Biblioteca Popular en no terminar su edificio, e incumplir con lo pactado con el municipio en la entrega de dicho espacio, no hace reflexionar sobre la enseñanza de los que pregonan una formación cultural mejor.


De lo expuesto sólo se puede deducir conductas reprochables, qué malos ejemplos nos pueden dar estos miembros si no respetamos la palabra empeñada, incumplir con normas legales ¿está bien? O acaso arrogarse sobre un fin cultural, justifica desconocer las obligaciones municipales para fines en que sus funcionarios están obligados a prestar en nombre de todo un pueblo”, agrega la declaración en nombre del gobierno municipal.


Por su parte, desde la Biblioteca Popular hicieron saber su postura ante este conflicto, aduciendo a que fue intimada verbalmente a “desalojar” el lugar que ocupa. La misma posee cerca de 7 mil libros y considerando que se está en época escolar, les resulta imposible guardar los textos en cajas; ya que son requeridos por vecinos, estudiantes de las escuelas primaria y secundaria. “Inclusive ingresantes de las facultades de medicina realizan sus monografías con el excelente material con el que disponemos; lo que necesitamos es un tiempo más en este lugar, hasta terminar el salón que ya tienen iniciado”, manifestaron mediante un documento escrito.


Asimismo comentaron que si bien reciben ayuda de nación, provincia y particulares en material, no reciben ningún tipo de ayuda monetaria más que el cobro de las cuotas, el boletín mensual y las propagandas del mismo. Al cierre de esta edición se pretendía realizar un abrazo simbólico en la biblioteca con el apoyo de vecinos, asociados, y alumnos de ambas escuelas.