El gobernador Sergio Urribarri recorrió el viernes en Crespo la remodelada planta procesadora de pollos Optimo, de la empresa Sagemüller, que en dos semanas comenzará a operar luego de su cierre en febrero de 2002. “La reapertura de este frigorífico es un momento importante en la ciudad, provincia y país; es un síntoma de vitalidad y de futuro”, resaltó el gobernador. Por su parte el empresario explicó que la capacidad de la planta es de 7.300 pollos por hora, y si bien comenzaran con un ritmo menor, la intención es faenar alrededor de los 30.000 pollos diarios, para lo que se incorporaron alrededor de 88 obreros y seguramente más adelante se seguirá incorporando personal para un segundo turno.

“Siempre digo que los empresarios entrerrianos son inversores compulsivos, siempre están explorando la manera de crecer y de invertir. La recuperación de una empresa de marca emblemática nos llena de esperanza y de compromiso porque los gobiernos debemos ayudar a las empresas que dan trabajo gobernando bien, siendo eficaces y facilitando la producción”, destacó Urribarri.


El mandatario acompañado por el intendente Juan Carlos Brambilla y el secretario de Interrelación Municipal, Héctor Alanís, destacó que la empresa nunca solicitó ayuda económica al gobierno, “sólo acompañamiento del estado para que abra puertas, facilite trámites y así estuvimos en todo momento”, señaló el mandatario provincial.


Subrayó que “situaciones como ésta, de reapertura de empresas está pasando en muchos lugares de la provincia. Eso significa esperanza, futuro”. Aseguró que “en esta actividad vamos a tener enormes sorpresas en los próximos días, semanas”.


Anunció: “Estamos casi listos para cerrar un programa de financiamiento para que el sector avícola pueda crecer mucho más de lo que ya está creciendo. Lo venimos hablando con representantes del sector y con la entidad crediticia más grande de la provincia que es el Bersa y el Finver. Vamos a estar en condiciones en los próximos días, semanas, de anunciar un programa de crecimiento importante en el sector avícola provincia”.


Por su parte, Franz Sagemüller al recibir al gobernador le dijo: “Somos un pueblo de productores”. El empresario a medida que recorrían las instalaciones le fue explicando todas las modificaciones y reestructuraciones que se realizaron para poner la planta nuevamente en funcionamiento. “Se cumplieron con todas las normativas”, explicó Sagemüller, resaltando que además se ha implementado el tratamiento de vísceras, lo que antes era una problemática para la planta.


“Fue un momento gratificante contar con la presencia del gobernador que ha tenido la gentileza de venir a Crespo, ver nuestro trabajo y el esfuerzo que se ha hecho”, resaltó al tiempo que precisó que si bien la capacidad de planta es de 7.300 pollos por hora, “vamos a empezar a un ritmo menor, porque todo comienzo requiere adaptación de la operación completa. La intención es faenar alrededor de los 30.000 pollos diarios, para lo que se incorporaron alrededor de 88 obreros y seguramente más adelante se seguirá incorporando personal para un segundo turno”.


El empresario subrayó: “En Crespo tenemos bastante amor propio, por algo somos la Capital Nacional de la Avicultura. Este frigorífico se inauguró en 1953, en una asociación con productores y la cooperativa de Crespo, trabajaba fundamentalmente huevos y luego incursionó en la producción de pollos”.


Por su parte, Mario Gareis, empleado de la planta dijo que “este es un nuevo desafío como otros tantos. Mi trabajo siempre fue mantenimiento de obras civiles y nuevas construcciones. Esta planta es uno de los trabajos que hemos emprendido y orgulloso de verlo terminado”.


Gareis precisó que una parte de la planta fue demolido y otra construida nuevamente. En cuanto a la maquinaria, indicó que se trata de las mismas que estaban paradas desde hace nueves años, las que fueron restauradas.


La planta tiene un capacidad para procesar 7.300 pollos por hora, pero en un principio se producirán alrededor de 5.000 unidades por hora hasta tanto se pueda contar con materia prima suficiente para alcanzar la capacidad máxima. En un principio, la planta será una fuente laboral para alrededor de 80 familias, algunos ex empleados que serán reincorporados y otros nuevos que se incorporan con esta reapertura, todas personas que viven en la zona.


Franz Sagemüller recordó que “la empresa supo ocupar el cuarto lugar en materia de producción de pollos, ahora arranca en el lugar 30 y pico, pero esperamos alcanzar nuevamente los primeros lugares en esta materia. En Crespo tenemos bastante amor propio y eso generalmente nos ayuda y nos empuja a crecer”.


Todas las áreas reestructuradas de la planta fueron realizadas también por una empresa de refrigeración local, MTH SRL, que tiene sus instalaciones en el parque industrial de Crespo. Para dar una dimensión de lo que se reformó, Sagemüller precisó: “se sacaron al menos 20 camiones de escombros de todo lo que tuvimos que tirar abajo, ya que eran estructuras viejas y ya obsoletas para las exigencias actuales”. (APF.Digital)