La zafra resultó un tercio de la lograda en el ciclo anterior. Se recolectaron poco más de un millón de toneladas, cuando la trilla de la campaña 2007/08 había dejado casi 3 millones. Pero lo más significativo es que los productores entrerrianos perdieron más de 460 millones de pesos. El rinde promedio, sobre la superficie implantada, fue bajísimo: 948 kg/ha. Para recuperar el monto invertido en la siembra era necesario un rinde promedio de 2,230 kg/ha. La información se desprende de un informe técnico elaborado por el Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (Siber).

El trabajo, al que tuvo acceso EL DIARIO RURAL, indica, además, que en la campaña 2008/09 se cosecharon 1.059.992 toneladas, apenas un tercio de lo producido en el ciclo anterior.


• Detalles


El efecto de la intensa sequía que padeció la provincia queda reflejado al analizar la evolución del cultivo en los últimos años. Desde la campaña 1999/2000, remarca el informe del Siber, la superficie sojera en Entre Ríos “venía incrementándose fruto de la demanda mundial de alimentos y de la mano de avances tecnológicos que han logrado insecticidas y herbicidas de bajo impacto ambiental, si se los compara con los empleados décadas atrás”. En esta última campaña, sin embargo, el área implantada sufrió una merma del 14,55 %.



En este marco, la producción “alcanza prácticamente a un tercio de lo producido en el ciclo agrícola anterior cuando, a pesar de que climáticamente fue un año desfavorable por el efecto Niña, se obtuvieron 2.979.275 toneladas”. Es decir que Entre Ríos perdió este año con respecto al ciclo anterior 1.919.283 toneladas.


• Rindes



Los productores entrerrianos, precisa el trabajo, “sembraron 1.117.660 hectáreas y lograron producir 1.059.992 toneladas”, y si se calcula el rendimiento sobre la base del área implantada “se obtiene un rinde promedio provincial de 948 kg/ha”.



Los técnicos del Siber hacen hincapié en este punto para dimensionar en su real magnitud el flagelo de la seca que hizo que se perdieran 147.600 hectáreas. Esto significa que “hubo un 13,2 % de la superficie total en la cual los productores invirtieron el costo de implantación y tuvieron productividad cero”, subraya el informe.


• Gastos



Al analizar los gastos del productor en esta campaña, el Siber estimó que para “el recupero del monto invertido en octubre – noviembre de 2008 era necesario obtener rendimientos promedios de aproximadamente 2.230 kg/ha”, es decir que esta cosecha finalizó con una pérdida de 1.282 kg/ha.



Como la producción de la oleaginosa aportó 1.059.992 toneladas, la ecuación económica “es muy negativa ya que el total de erogaciones realizadas para arribar a este resultado fue de $ 1.562.998.720 y el recupero a la cosecha fue $ 1.102.391.680”, lo indica una pérdida de $ 460.607.040.



Este cálculo, aclaran los técnicos, se realizó “teniendo en cuenta que en el 70 % de la superficie se paga arrendamiento el cual se estimó en 8 qq/ha para la soja de primera y 4 qq/ha para la de segunda” mientras que para las 147.600 ha perdidas “se calculó sólo el costo de implantación”. A las restantes se le agregó gastos de comercialización y cosecha y para el cálculo de recupero se tomó el precio pizarra Rosario del 29 de mayo pasado. (APF.Digital)