El diputado vialense, del bloque Peronismo Federal, Gustavo Zavallo junto a sus pares Cristina Cremer de Busti, María de los Ángeles Petit, plantearon su preocupación ante la falta de respuestas concretas del Jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, al problema del déficit que presentan la mayoría de los gobiernos provinciales. Los diputados expresaron que el déficit previsto para las provincias para este año es entre 10 y 12 mil millones de pesos y de 15 mil millones para el 2010. “Nos preocupa la relación entre la Nación y las provincias. No podemos seguir con este esquema unitario, alejado de las ideas del federalismo”, afirmaron.
Los legisladores entrerrianos, junto a otros bloques justicialistas no kirchneristas, vienen presentando hace tiempo proyectos de ley solicitando una mayor coparticipación del impuesto al cheque, la coparticipación de todos los derechos de exportación, los fondos de los ATN, el 1,9% que la AFIP le restan a los fondos coparticipables para su financiamiento, entre otros.
Ante estas preguntas, planteadas por escrito y verbalmente, Fernández remarcó que ningún gobernador le había planteado a la presidenta sus necesidades en estos términos y que no se tenían previstas medidas en este sentido.
Las preguntas de Petit y Zavallo
“Quisimos preguntarle al Jefe de Gabinete cuestiones puntuales que preocupan a nuestra provincia, como lo es el problema de la exportación de trigo y la diferencia de precios de los combustibles” afirmó la diputada María de los Ángeles Petit, presidente del bloque Peronismo Federal.
En relación a la pregunta realizada sobre la diferencia de precios de los combustibles entre Capital Federal y el interior del país, que en Entre Ríos es un 25% superior a la ciudad de Buenos Aires, Fernández afirmó que “los precios de la comercialización de los combustibles se encuentran desregulados por lo que son libremente fijados por las reglas de mercado. Los mismos deben ser un reflejo de la relación entre la oferta y la demanda”.
El diputado Zavallo, en su intervención en el recinto, le cuestionó el porqué “el gobierno deja librado al mercado la fijación de precios a este insumo estratégico para los sectores de la producción, el transporte y la economía en general, perjudicando así las economías regionales y las provincias más alejadas del Puerto de Buenos Aires”.
Por su parte Petit, le preguntó a Fernández si era consciente que el gobierno nacional favorece a las multinacionales exportadoras y a los grandes molinos harineros, entre ellos Cargill, ya que desde hace dos años se están quedando con la diferencia de precios entre los 600 pesos FAS por tonelada de trigo que estableció el gobierno y los 450 que realmente se le paga al productor.
Por último, en relación al crecimiento de la superficie sembrada de soja en el país, récord histórico en la presente campaña, Fernández afirmó que “tenemos que vender al mundo lo que el mundo nos pide. Si el mundo nos pide soja, plantemos soja hasta en las macetas”, lo que va en contra de la diversificación de actividades productivas y la conservación del suelo.