El domingo a la mañana el teléfono sonó, como tantas veces en un fin de semana y uno ya se predisponía a atender para escuchar lo que casi siempre era, alguna novedad, como para armar otra noticia. Esta vez del otro lado estaba Luís, su comentario fue “Walter tuvo un accidente”. Y después todo lo que relataron algunos colegas.

Que difícil es interpretar estos momentos cuando se trata de un amigo. Tan solo 31 años y nos dejó, es un duro golpe, ha calado muy profundamente en este, su querido pueblo.


Cuántos amigos en tan corta vida supo cosechar el “Ruso”, es que resultaba casi imposible resistirse a un  tipo con tanto afecto, generosidad, simpatía y la vocación solidaria para estar siempre donde podía ser útil.


Tu partida es un duro impacto, especialmente para tu familia y para quienes compartimos tantos momentos, a partir de esta pasión que abrazamos por vocación, el periodismo.


Nos quedan infinidad de grabaciones con notas, publicidades, anécdotas, fotos, y un  sinfín de recuerdos que van apareciendo, que se van sumando en cada momento. Todo lo que tenía para contarnos por la radio este lunes, de los momentos que vivió hasta el amanecer del domingo, se fueron con él.


Cuantas veces nos invadía la adrenalina de saber que estábamos con una noticia que era primicia, como disfrutabas……..como olvidar esa sonrisa cómplice.


Cuantas veces disfrutaste de tu otra gran pasión, el fútbol. Cuanto sufriste cuando tu rodilla te dijo basta y a pesar de que intentabas una y otra vez, no era posible.


Y bueno, te resignabas con dedicarte a enseñar a los pibes de “Corralito”, tratando de ir forjando en algunos chicos ese juego exquisito que te llevó a jugar en las inferiores de Newell´s Old Boys de Rosario. Seguramente a ellos también le habrás contado cuando compartías la pensión con el “Sonri” Gabriel Heinze.


Nunca podré olvidar los momentos que pasamos siendo dirigentes en la Comisión Directiva del CUAC. “No me dan los tiempos, pero igual quiero acompañarte”, me decías. Cómo no aprender a valorar a un amigo incondicional, en las buenas y en las malas.


Era tan noble tu personalidad, que hasta en los últimos años también te transformaste en él coordinador de “Abuelos en Acciòn”. Que notable, con tan solo 31 años eras capaz de reunirlos, organizarlos, que te escucharan y hacerles entender que con cosas simples podían disfrutar mejor la vida.


De igual manera disfrutabas con los jóvenes en tu programa “Radio Hits” en una ida y vuelta con los adolescentes con quienes siempre tenías picardías para compartir. Hasta incorporaste a mi hijo por algunos momentos en la conducción, trasformándolo en el mejor compinche para tus travesuras radiales.


Cuantas cosas juntas, no querías fallarle a nadie. Cuantos planes quedaron truncos. Una y mil veces nos acongoja pensar en el injusto destino.


Ruso querido, amigo como pocos, cuanto te vamos a extrañar.
En este viaje podes ir tranquilo hermano………te ganaste un pedazo de nuestra alma y ella te estará acompañando en tu camino hacia el cielo. 


Guillermo-Norma-Guille “Chengue”


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