Los próximos cinco días serán claves para el sector productivo entrerriano. Si para de llover, los productores podrán continuar con la cosecha de trigo y con la siembra de soja; pero si las precipitaciones continúan la situación se complicará. Las abundantes lluvias de los últimos días no permiten el ingreso de las máquinas a los campos para levantar el trigo que ya está listo y a punto de comenzar a perder calidad. Tampoco permite el ingreso a los ansiosos productores que quieren comenzar a sembrar más de un 1,3 millones de hectáreas de soja en la provincia de Entre Ríos.
“Hasta hace una semana la lluvia era una bendición, todo el campo la estaba esperando, porque, aunque había llovido un poco más que el año pasado, seguíamos en estado se sequía respecto de lo que necesitaban los cultivos”, remarcó el ingeniero Juan José Bruno, responsable de
En los últimos 10 días llovieron unos
“Lo bueno sería que en los próximos días se suceda una semana sin lluvias para poder ingresar a los campos y levantar el trigo que ya está listo y, en algunos casos, revolcado por las fuertes tormentas de viento que se han sucedido”, destacó Bruno, señalando además que esta situación, sumada el exceso de humedad puede perjudicar los granos haciéndoles perder calidad, y por consiguiente, disminuyendo su valor en el mercado.
“Con una semana sin agua también se podrá ingresar para sembrar lo que será la cosecha gruesa que ya está lista para el comienzo, los agricultores esperaban algo de lluvia para comenzar, pero no tanta claro”.
De los 2 millones de hectáreas dedicadas a la agricultura en Entre Ríos, 1,3 millones son para soja, esto es casi el 70 % de la cosecha gruesa de este año que comprende además, al maíz, el sorgo y el girasol.
La lluvia está demorando la siembra de una superficie que
Cosecha gruesa
Aunque algo demorados en el tiempo, algunos productores están en condiciones de sembrar algo de maíz, pero en mayor medida la elección de los productores se volcará masivamente a la soja, por lo que las condiciones del tiempo de los próximos días marcarán el inicio efectivo de esta campaña.
Por ahora la enorme cantidad de humedad absorbida por los campos hacen imposible el ingreso de la maquinaria, tanto para la cosecha como para el cultivo.
El único caso positivo que rescata el profesional de esta sucesión de lluvias copiosas es el de las pasturas, “que viniendo de una tremenda sequía ahora se han visto notablemente beneficiadas por el aporte de agua a los suelos”.
“Respecto de lo que pasaba el año pasado, con las cuantiosas pérdidas que provocó la sequía, la cosecha de trigo de este momento aún está en una situación excepcional, y lo que está sucediendo hoy es, por ahora, solamente un exceso de humedad que dificulta las tareas de recolección, los trigos están muy lindos, pero si demora mucho este tiempo así, se puede perder calidad. Es una situación delicada pero no extrema”, destacó Bruno.
Si bien el trigo está listo para cosechar y en la mayoría de los campos entrerrianos se avizoran buenos rindes, el volumen de los cultivos no incide de forma notoria en el global nacional ya que Entre Ríos no es uno de los espacios de mayor producción.
En
Si bien el presidente de
Respecto al desarrollo de la campaña de comercialización, el titular de
Según datos de la entidad, hasta el jueves 18 sólo se levantó un 10% de lo sembrado. “Mucho más no se avanzó producto de las precipitaciones, pero tenemos que esperar los nuevos informes”, explicó Gladys Eguía, responsable del Sistema de Información Bolsa de Cereales de Entre Ríos. Además aseveró que “el exceso de humedad en el suelo genera complicaciones para continuar con la cosecha de maíz y la siembra de soja”. En este sentido, detalló que “hay lugares, en especial en la zona norte de la provincia donde la lluvia ha sido totalmente exagerada, donde hay que resembrar lotes de soja”.
No obstante, Eguía mencionó que “todavía no podemos calcular los perjuicios, porque no podemos ingresar a los campos”. Eguía indicó que el jueves se conocerán los nuevos informes detallado de todo lo sucedido en la provincia. En ese orden, indicó que producto de la fuerte caída de granizo en Victoria y Nogoyá se perdió trigo y soja recién sembrada, pero aún no pueden saber la cantidad; tampoco conocen cómo quedó el maíz sembrado en esa zona.
“No quieren entrar a cosechar el trigo porque se huella el campo y cuando se siembra la soja el piso queda abollado”, destacó el Ingeniero Agrónomo Pablo Fontanini, quien indicó que “podría haber perdidas de rendimientos y calidad, pero que todavía es muy difícil realizar una evaluación de este tipo.
El transporte, está complicado
Ludi afirmó que “vamos de un extremo a otro”, y añadió: “Solucionamos el tema tarifario y ahora estamos parados porque no se puede entrar a los campos, pero ya estamos viendo que cuando pare de llover vamos a tener el problema de la falta de precios para comercializar”. Fuente; Uno