El Informe Climático Semanal indica para la festividad de Reyes y días sucesivos, precipitaciones que cubrirán gran parte del área agrícola nacional, pero su distribución mostrará signos evidentes de la influencia de “La Niña”. En su Perspectiva Agroclimática Nacional – que comprende el período del 5 al 11 de enero de 2008 – la Bolsa de Cereales de Buenos Aires estima fuertes oscilaciones térmicas y precipitaciones sobre el norte y el este del área agrícola nacional. Las perspectivas indican que en nuestra región no se recibirán valores suficientes de agua para reponer el contenido de humedad de los suelos.

 



Como es usual en esta época del año, hacia la festividad de Reyes y durante los días sucesivos, tendrán lugar precipitaciones que cubrirán gran parte del área agrícola nacional, pero su distribución mostrará signos evidentes de la influencia de “La Niña”.


Se producirán fuertes tormentas sobre el Noroeste Argentino y el oeste de la Región del Chaco; El este de la Región del Chaco y el norte de la Mesopotamia registrarán lluvias abundantes; El este de la Región Pampeana observará valores moderados, y el oeste de la Región Pampeana y Cuyo experimentarán registros escasos.


Desde el punto de vista térmico, se producirán fuertes oscilaciones de la temperatura, alternándose períodos cálidos con marcados descensos de la temperatura. Las precipitaciones previstas beneficiarán a buena parte del área agrícola, mejorando las reservas hídricas de algunas zonas que, como el Sudeste de Buenos Aires, necesitaban urgentes aportes de humedad para reponer sus reservas.


Lamentablemente, la mayor parte de Córdoba, el centro y sur de Santa Fe, La Pampa y el oeste y el sudoeste de Buenos Aires no recibirán valores suficientes para reponer el contenido de humedad de los suelos.


Durante la segunda quincena de Enero y la primera quincena de Febrero, la Región Pampeana afrontará el período crítico de la campaña agrícola, con precipitaciones escasas y una fuerte ola de calor.


Por su parte, es probable que el Noroeste Argentino y el oeste de la Región del Chaco comiencen a sufrir problemas por excesos hídricos, que se irán acentuando, hasta alcanzar su máximo a comienzos de otoño.