Como es habitual año tras año, un grupo de personas de esta localidad viajó hasta el monte chaqueño para llevar ayuda humanitaria a los habitantes aborígenes de esa región. En su periplo por zonas inhóspitas distribuyen los elementos que logran reunir en Cerrito y la zona tales como; ropa, alimentos, medicamentos, juguetes y golosinas, mediante los cuales pueden asistir a sectores aborígenes que viven bajo altos índices de pobreza en el norte argentino. La delegación que había partido el miércoles anterior con un camión repleto, llegó con su asistencia a las localidades de Miraflores y los centros rurales de población como, Techat, Central Norte y Zapallar, zona que además soporta el flagelo de la inundación. Varios de los integrantes de la delegación que ya viajaron en reiteradas oportunidades, no dejan de asombrarse por las extremas condiciones de miseria y abandono en la que sobreviven miles de argentinos.

La séptima misión estuvo integrada por Araceli Steven, Diego Silvestre, Nestor Sphan, Carlos Jacob con sus hijas Romina y Debora, Diego Silvestre (h), Luis Ceparo y Rubén Richer. Todos ellos han formulado un especial agradecimiento a quienes colaboran con la misión e invitan a sumarse para programar la octava delegación que partirá el año próximo