Opinión: Por Elias Eduardo Ruda(*).No dejan de sorprender las curiosas situaciones que se van produciendo alrededor de la Reforma de la Constitución. Como era de esperarse, lamentablemente una parte de la dirigencia política de la Provincia de Entre Ríos, no puede entender el carácter programático de la Constitución, y constantemente la cruza con planteos coyunturales actuales y pequeños de interna partidaria. El Justicialismo mete su interna en la Reforma.
La periodicidad de funciones y la alternancia son elementos caracterizantes de una democracia republicana. Para que estos puntos programaticos se cumplan, los mandatos de los funcionarios electivos deben tener un plazo, el cual debe ser prudente puesto que de lo contrario se tiende a la eternizacion de los dirigentes en los cargos y la frustracion de generaciones enteras que se quedan por debajo de estos dirigentes que taponan carreras politicas de los mas jóvenes.
Estas propuestas de eterización, se encuentras sustentadas en un proyecto electoral asistencialista – clientelista, que implica en definitiva un circulo vicioso que no deja entrar aire fresco al sistema democratico que sabiamente fue previsto en la Constitución del 33.
A 20 de los “actuales” intendentes justicialistas, a los que por primera vez en la historia se les concedió dos mandatos consecutivos, se le ocurre que la constitución no debería limitar su tiempo en los cargos, o sea de aquí a la eternidad…
Pretenden que sean las Cartas Organicas locales y no la propia Constitución Provincial, las que fijen los plazos de los mandatos. Esto es tremendo, por que estos dirigentes a cargo hoy de importantes responsabilidades en nuestros Municipios, no han comprendido la esencia de la democracia.
Estos actuales funcionarios, con actual poder en sus municipios, se juegan a influenciar a los futuros convencionales de sus ciudades, para que en las Cartas Orgánicas incluyan un mandato con reelección indefinida para los intendentes. Todo un despropósito que hay que evitar.
Otros puntos que se relacionan con cuestiones internas, son tan graves como este.
La reducción de la base porcentual originariamente previsto como coparticipación para los Municipios, del orden del 20% ha sido reducida por la visión coyuntural del actual gobierno provincial. No se ha pensado en el futuro y en la transformación del sistema de aplicación de recursos.
Una visita del actual ministro Valiero, le permitió al actual gobierno reducir este porcentual y hacerlo gradual, de manera tal que al actual gobierno provincial, no se le achique su caja – y su poder sobre los intendentes en la interna del justicialismo – . Las modificaciones al régimen de coparticipación tienen una mirada absolutamente coyuntural.
Así mismo, se ha cambiado el régimen de mayorias que deben lograrse en los Concejos Deliberantes, para tomar emprestitos o enajenar bienes. Antes se requerían los 2 / 3 ahora podrá lograse es propósito con la mitad mas uno de los concejales. Esto hará que las decisiones no tengan el control de la oposición.
Nuevamente aqui, se cruzan las necesidades coyunturales internas. No se trata nada mas que de cambiar un régimen de mayorias. Se cambia una cláusula programática de la Constitución del 33, que se encontraba revestida del principio de control de los actos trascendentes de gobierno, por la oposición.
Ahora, las mayorías circunstanciales de la última elección, podrán enajenar con el acuerdo del propio bloque, todos los inmueble y rodados que se desee, y tomar todos los prestamos por el plazo y tasa que se les ocurra…un desvió inaceptable…
(*)ELIAS EDURADO RUDA – Abogado
Ciudad de Crespo.
FOTO: Siglo XXI