La médica de Policía de Hernandarias, oficial principal Julia Martínez, fue demandada por un hombre de esa localidad que estuvo detenido por violación durante 18 meses en la cárcel de Paraná debido a que la profesional habría hecho un diagnóstico equivocado. Ella sostuvo que halló lesiones y semen en la hija de 13 años del imputado. Esto llevó a la ex jueza de Instrucción, y actual integrante del STJ, Susana Medina de Rizzo a procesar al hombre por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.
Durante el juicio oral la madre de la menor admitió, entre otras cosas, que todo se trató de una mentira en venganza por las reiteradas infidelidades de su esposo. Por esto la menor fue revisada por los médicos forenses del Superior Tribunal de Justicia Luis Moyano y Carlos Falcón. Los profesionales comprobaron que la niña jamás había tenido relaciones sexuales y que no presentaba lesiones. Por otra parte, el departamento de Genética determinó que lo hallado en la zona genital de la nena no era semen, sino flujo vaginal.


La demanda contra la profesional fue presentada por el abogado Guillermo Mulet, ya que durante el juicio los médicos del STJ constataron que la niña era virgen. Además, en el juicio realizado el año pasado, los integrantes de la Sala I de la Cámara del Crimen absolvieron de culpa y cargo al imputado por inexistencia del hecho, motivo que llevó al fiscal a no acusar durante los alegatos, debido a que los informes de los médicos forenses eran claros y contundentes.


Para Mulet “la médica habría obrado con impericia y falta de conocimiento, lo que generó una confusión tal que llevó a una jueza a dictar el procesamiento y prisión de su cliente por un hecho que no existió”.


La demanda por daños y perjuicios alcanza al Gobierno de la provincia de Entre Ríos, como a la profesional y es por un monto cercano a los 225.000 pesos.