La imposibilidad de cosechar y revisar cultivos abre un inmenso interrogante el torno del umbral del daño económico que producirán los 860 milímetros caídos sobre el territorio desde enero y particularmente los 287 de las últimas 48 en Paraná Campaña. En oleaginosas, es de esperar que se manchen las semillas por exceso de humedad. Lo que será motivo de preocupación para los asesores técnicos y productores es la aparición del complejo de hongos que naturalmente aparecerán con las condiciones actuales de humedad.


 
Las labores rurales, en especial las de perfil agrícola, están detenidas en la provincia desde el jueves 22 de marzo.


Según datos de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, se había trillado el 63% de la superficie maicera, que esta campaña llegó a las 165.167 hectáreas. El rinde promedio logrado fue establecido en las ocho toneladas por hectárea.


Es de prever que tales marcas se desplomen a menos de la mitad cuando se puede culminar la cosecha atento que los expertos ya denunciaron el brotado de granos producto de la humedad que ingresa en la espiga. Una situación similar padecen los cuadros plantados con sorgo.


Por el andarivel de la vedette de la agricultura mundial, se impone precisar que apenas se cosechó el 3% de la soja entrerriana, de un total estimado en 1,35 millones de hectáreas. Al 22 de marzo los rindes fueron de entre dos y cinco toneladas.


En esta oleaginosas es de esperar que se manchen las semillas por exceso de humedad. Lo que será motivo de preocupación para los asesores técnicos y productores es la aparición del complejo de hongos que naturalmente aparecerán con las condiciones actuales de humedad.


Caminos y almacenaje


Para poder entrar a los campos habrá que rezar y en gran modo: se prevé que la espera para reacondicionar la red vial provincial se extienda por un mes a contar desde el fin de las precipitaciones, cosa que por ahora nadie sabe cuando sucederá.


Es poca la disponibilidad de lugar en los acopios, si bien la cosecha no sale de los campos, la capacidad está reservada por completo”, comentan los entendidos.


La imposibilidad de cosechar y revisar cultivos abre un inmenso interrogante el torno del umbral del daño económico que producirán los 860 milímetros caídos sobre el territorio desde enero y particularmente los 287 de las últimas 48 en Paraná Campaña.


Fuente: Campo en Acción.