Las abundantes lluvias del mes de marzo fueron acumulando dificultades para los sectores productivos en nuestra región. La producción láctea, una de las más afectadas por los inconvenientes que representa no poder sacar la leche a los caminos transitables. Esta situación generaría desabastecimiento en algunos sectores. El presidente de la Unión General de Tamberos, Guillermo Draletti, afirmó que las aguas asolan el corazón de la cuenca lechera y que es difícil sacar la leche a los caminos.
“Realmente, estamos haciendo un esfuerzo grande para derivar mercadería de exportación al mercado interno”, afirmó el empresario, quien subrayó el fuerte impacto de las inundaciones en la cuenca lechera argentina.
“Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos aportan el 90% de la leche argentina”, expresó Draletti, quien reconoció: “Estamos en problemas, porque la industria lechera es una industria del transporte”.
Sobre la escasez de la materia prima en las fábricas de lácteos, consideró que “se empezó a notar. Hay una disminución de rendiciones de leche a las fábricas de 30 ó 40%”.
Apuntó además que “en este momento, usted no puede sacar la leche a los caminos y la cantidad de agua es bastante complicada y afecta las pasturas”.
“Es un golpe fuerte y nos complica”, resumió el productor.
