Productores rurales de Tabossi y Viale denunciaron la aparición de animales extrañamente mutilados. Los animales, todos vacunos, tienen extirpados los genitales, las lenguas y las ubres, así lo explicó Abel Gunter, uno de los productores afectados, quien calificó al hecho como “extraño” y aseguró que entre los pobladores rurales existe “preocupación” e intriga por las muertes de los animales. “Nosotros decimos que son los extraterrestes que vienen a mutilarnos las vacas”, aseguró hoy el productor.

El campesino insistió en que “hay algo extraño” en la muerte de los animales, porque los perros de la zona y los animales salvajes, que generalmente se alimentan de los restos de las vacas muertas, no se acercan a los animales mutilados.
“Esto es muy extraño, porque ningún animal salvaje se acerca a comer los restos de las vacas muertas”, dijo.
Gunter explicó que hoy encontró una vaca mutilada en una zona de espesos montes de su campo y agregó que “el animal tiene un corte tan perfecto en la mandíbula que causa extrañeza”.
El productor comentó a LT 14 que hechos similares se produjeron también en varios campos vecinos y reveló que la vaca que encontró muerta en su campo “tiene en la pata trasera una quemadura que se extiende hasta la rodilla”, cuyo origen no puede explicar.



En busca de una respuesta al fenómeno
Hay quienes sostienen que se está ante un fenómeno no terrestre. Aunque hasta el momento no hay pruebas que confirmen la presencia de ovnis y vida extraterrestre. Lo cierto es que todo se asemeja a lo sucedido hace poco más de cinco años, cuando el 26 de junio de 2002, se encontró el primer caso de vacas mutiladas en la zona de la costa del río Uruguay que luego fue extendiéndose a toda la provincia. La forma de incisión es muy similar, con la diferencia que en aquella oportunidad a las vacas se las encontraba sin quijada ni lengua. Con el tiempo todo pasó a ser una anécdota y al olvido, pero hoy sale nuevamente a la luz.


Los productores de la zona de Maciá en el departamento entrerriano de Rosario del Tala, buscan respuestas al fenómeno, pero descartan que los extraños y frecuentes casos, se traten de muerte natural de ganado vacuno. “Las vacas se caen y se mueren. Tiene que ser un bicho grande que ataca el ganado. Tendría que haber un rastro donde el animal atacó la vaca, pero tampoco hay rastros de nada, ni de pelea”, afirma finalmente el asombrado hombre de campo, según reproduce Canal Once.



Antecedentes: Ciervos mutilados en 2005
El último caso que tomó trascendencia en la prensa fue la extraña muerte de ejemplares de ciervos en un coto de caza del Departamento Uruguay, en un artículo publicado por el Diario Uno de Entre Ríos el 28 de diciembre de 2005.
Aquel misterioso caso que se registró en la estancia La Medalla Milagrosa, ubicada a unos 50 kilómetros de Concepción del Uruguay, cercana a la costa del río Uruguay, generó preocupación entre los lugareños ya que se trataba de hembras que aparecieron mutiladas, a las que les extirparon los genitales y órganos reproductores.
Según se pudo observar en esa oportunidad, a los animales sólo se les extirparon los genitales y órganos reproductores con incisiones similares a las vistas en vacunos durante 2002 en distintos puntos de la Argentina, hecho que causó conmoción en localidades del país.



Algunos casos del año 2002
Entre abril y septiembre del 2002 hechos fuera de lo común se dieron cita en los campos de República Argentina. Desde esa fecha todo tipo de animales aparecieron “acostados” en los terrenos con extrañas incisiones, ciertas peculiaridades y patrones.
Tras la aparición de casi cien casos registrados en campos de Río Negro, La Pampa y Buenos Aires, se sumaron nuevos hallazgos de animales mutilados en Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires y se denunció la aparición de un guanaco muerto, que presentaba cortes similares a los realizados a los vacunos, en Península Valdés, Chubut.


21 de junio
En Entre Ríos, cerca de Hasenkamp, se halló una hembra de raza Aberdeen Angus a la que le habían extirpado las partes genitales, la ubre, la lengua, los músculos de la quijada y los ojos, sin tocar los cortes que habitualmente se aprovechan para el consumo humano. Las cirugías estaban cauterizadas.
Cerca de allí, 40 kilómetros al sudeste, en la colonia Santa Luisa, el productor Rafael Franco constató que a una vaca muerta días atrás le faltaban los músculos de la mandíbula.
Los productores denuncian que el ganado aparece muerto y con mutilaciones: le falta lengua, laringe, faringe y los genitales, y tiene algunos huesos pelados. El Once Digital.