Próximo a cumplir su centenario, Seguí alberga en su pueblo a uno de los personajes que seguramente, enorgullece a los habitantes de esta localidad. Se trata del Científico o Técnico Autodidacta, como el prefiere que lo llamen, Rubén Bruno. Dentro de sus mayores logros en el campo de la bioingeniería, desde 1987 a 1995 llevó adelante una intensa actividad investigativa, diseñando y desarrollando dos modelos experimentales de corazón artificial univentricular. Estos prototipos, en el futuro se podrían utilizar para mantener con vida tanto a pacientes con insuficiencia cardíaca refractaria como también a enfermos cardíacos terminales, durante meses, mientras están a la espera de un trasplante, logrando corregir antes del mismo insuficiencia renal, congestión pulmonar y todos los demás aspectos metabólicos ligados a un gasto cardíaco insuficiente.
El equipo ajusta su funcionamiento en forma automática, detectando las distintas arritmias cardíacas a través de la señal electrocardiográfica y de los datos presóricos del paciente. El software de control fue desarrollado por Bruno bajo las indicaciones del Dr. Augusto Ramos. El sistema detecta taquiarritmias, fibrilación ventricular, paro cardíaco, electrodos de ECG desconectados y otros datos que aseguran una repuesta adecuada de la prótesis ventricular encargada de mantener el flujo sanguíneo.
Este equipo tiene características únicas ya que puede programarse tanto para accionar una prótesis ventricular (DAV) o un balón de contrapulsación cardíaca (IABP) según sea el caso. Este último puede utilizarse para realizar asistencia circulatoria mecánica por contrapulsación intraaórtica o intraventricular con la ventaja que es menos invasivo.
La prótesis ventricular (DAV) también fue diseñada y elaborada por Bruno, la misma es de acrílico odontológico de grado biomédico, posee cavidades hemodinámicas y válvulas artificiales que aseguran la correcta circulación de la sangre. Este dispositivo permitirá restablecer rápidamente la perfusión sistemática logrando que pacientes extremadamente graves sobrevivan mientras esperan un donante que logre reunir las condiciones de compatibilidad.
BOMBA SANGUÍNEA PULSÁTIL
Este es otro de los modelos desarrollados por Bruno, se trata de una prótesis que no requiere de energía neumática para funcionar, sino de sensores, motores y un novedoso dispositivo de accionamiento electrónico inserto dentro de la misma.
Los dos modelos fueron supervisados y testeados en diversas oportunidades bajo la dirección profesional del cirujano cardiovascular Dr. Augusto Ariel Ramos. Participaron también investigadores y docentes de la Facultad de Bioingeniería (FI-UNER), Facultad de Medicina de Rosario (UNR), Fundación del Corazón de Entre Ríos y de la Dirección de Ciencia y Tecnología del gobierno de Entre Ríos. Además los resultados y trabajos escritos fueron presentados en distintos encuentros científicos y congresos de Bioingeniería y Cardiología de nivel nacional e internacional.
Durante el testeo los dispositivos presentaron un funcionamiento confiable, silencioso, superando las expectativas para la primera etapa investigativa. Lamentablemente la segunda fase no se ha podido llevar adelante dado que la provincia de Entre Ríos no cuenta por el momento con laboratorios adecuados para el desarrollo de la misma.
Mayor informacion de sus actividades se puden observar en: http://www.observatoriosoledad.com.ar