La Ley de Presupuesto 2016, Nº 10.403, establece en su artículo 13º lo siguiente: “El costo de la planta de personal docente suplente deberá tender a mantenerse dentro del 8% del costo del plantel docente permanente aprobado por la presente ley”. Sin embargo, en el Presupuesto 2016 el pago de sueldos en el Consejo General de Educación (CGE) demanda una cifra anual de 8.150 millones de pesos. El gasto en pago de suplencias ronda entre el 30 al 40%, una cifra que quintuplica lo que autoriza la ley. Afirman que en las escuelas públicas de gestión privada es mucho menor.
El dato es oficial del Consejo General de Educación (CGE), donde además dicen que el índice de suplencias en las escuelas públicas de gestión privada, aunque alto también, es mucho menor que en las escuelas estatales: ronda del 7% al 10%.
Cuando el gobernador Gustavo Bordet dirigió su primer mensaje a la Legislatura, en la apertura de las sesiones ordinarias, el lunes 15 de febrero, pronunció un duro diagnóstico de lo que ocurre en el sistema educativo. Dijo: “No puede haber cuatro docentes por pizarrón en la provincia. Vamos a ser implacables en el control de las suplencias. “No se puede aceptar que se den certificados médicos por motomandado”.
Ayer, durante un acto que presidió en el salón de actos del Consejo General de Educación (CGE), en el que anunció la creación de 11 nuevas escuelas Nina, le respondió al gremio docente y negó que la política educativa de su gobierno apunte al ajuste, aunque sí al control del gasto.
“La educación jamás va a ser un gasto para nuestra gestión. Es una hermosa inversión y por eso nunca vamos a promover un recorte en materia educativa”, dijo y acotó que se apunta a “más escuelas Nina, más programas, más chicos y docentes que se capaciten, pero tampoco vamos a tolerar que haya cierto sectores que tengan usufructo de una situación y no trabajen y haya otros docentes que todos los días cumplen con su tarea porque esto es una gran injusticia”.
La afirmación del gobernador pareció una respuesta al pronunciamiento que dio a conocer el último plenario de secretarios generales de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), que se reunió el 25 de agosto en Rosario del Tala, que repudió “enérgicamente el ajuste que se viene implementando en educación, ajuste que se expresa en el cierre de cargos de Maestros Auxiliares de Alfabetización Inicial, la recategorización hacia la baja de 136 escuelas en la provincia (con el consecuente cierre de cargos) y el cierre o achique de los programas socioeducativos nacionales (Plan Mejoras, Conectar Igualdad, Orquestas Infantojuveniles y Centros de Actividades Infantiles y Juveniles). Son responsables de este ajuste el presidente Macri, el Ministro de Educación Nacional Esteban Bullrich, el gobernador Bordet y el presidente del Consejo General de Educación Panozzo”.
En Educación sostienen que los índices del 30% al 40% de suplencias crean una situación “insostenible” hacia el interior del sistema. “Un docente titular se enferma y se designa un suplente. Ese suplente también se enferma y hay que designar suplente de suplente. Hay casos de cargos en los que se ha designado el quinto suplente”, dice una fuente del CGE.
Los cuadros de afecciones de la salud, según el relevamiento que ha hecho Educación, son variados. Aunque se destacan los cuadros psiquiátricos: bipolaridad, el estrés, incluso el estrés postoperatorio y las fobias que se presenta con diferentes manifestaciones. Se destacan las fobias a los espacios físicos, las fobias sociales, y las fobias a la autoridad.
En el CGE defienden el texto de la resolución Nº 2.566, que el organismo dictó el 4 de agosto último y que amplió el contenido de otra norma, la N° 2.565, dictada el 3 de julio de 2008, por la que se aprobó un manual de funciones de directores de escuela y se les impuso el deber de informar sobre asistencia de docentes.
Según esa directiva, el CGE quiere que los directores realicen “el control y carga de las asistencias del personal del establecimiento”, a través del Sistema de Administración de Gestión Educativa (SAGE). La normativa fija que “todo el equipo directivo deberá cargar la asistencia diaria del personal de su establecimiento educativo”.
Además de esa resolución, el titular de Educación, José Luis Panozzo, envió una nota a todos los directores departamentales de Educación para que, a su vez, notifiquen a cada directivo de la medida. Allí le recuerda a cada director que el “control y cargas de asistencia” es un “deber establecido como función y responsabilidad del personal directivo”.
En Educación admiten que la aplicación es complicada, y uno de los obstáculos principales está dado por el hecho de que no todas las escuelas tienen conectividad a Internet y eso dificulta el envío de la información sobre asistencia. De igual modo, esperan que a finales de mes puedan contar con un diagnóstico sobre el nivel de ausentismo en las escuelas, ya no por medidas de fuerza sino por enfermedad, que permita establecer hasta qué punto llega el índice de suplencias.
“La resolución no se dictó para descontar días de paro. Lo que se pretende es contar con información sobre asistencia e inasistencia. Estamos viendo que el ausentismo es muy alto y que los alumnos están migrando hacia las escuelas privadas”, admitió un funcionario del CGE.
